jueves, 11 de diciembre de 2014

Visita al Parque Nacional de Killarney (Irlanda)

Visita al Parque National de Killarney (Irlanda)

Pequeño entrante del Lago Leane

El Killarney National Park es el más antiguo de Irlanda, creado en 1932. También es actualmente el más extenso del país y declarado Reserva Mundial de la Biosfera por la UNESCO en 1981. Teniendo una joya así a un tiro de piedra (media hora en autobús desde el pueblo de Killorglin en el que vivo), no podía sencillamente estar un mes en este país y no ir a visitarlo (y tened por seguro que volveré mucho cuando regrese en enero).

Empecé desde Killarney ciudad y me adentré por el "River way", que sigue durante kilómetros en paralelo al río que cruza la ciudad y que desemboca finalmente en el Lago Leane, el más grande de los dos principales del Parque. Después de bordear la orilla seguí hasta el castillo Ross y finalmente de vuelta a la ciudad.

Vista desde uno de los puentes del "River Way"

Por cierto... aunque estaba lleno de gente, deportistas y tal, hubo casi una hora en la que no me crucé con nadie. Sensación relajante donde las haya.


Un parque "ideal"



Desde un punto de vista subjetivo, me gustó que no haya "exactamente" ninguna zona del parque inaccesible. Hay senderos que conducen a todas partes y puedes patear a gusto por donde te plazca para verlo todo. Hay caminos decentes (algunos asfaltados, otros de tierra entre la foresta) que te permiten llegar a cualquier punto de la orilla de los lagos, meterte en lo profundo del bosque o cruzar largos pastizales hasta las montañas. Todo perfectamente señalizado, además.


No necesitas salirte del camino y chafar por ahí porque hay senderos para recorrerlo todo, y hasta paseos en barco para ver los lagos. De ahí que estuviera todo (al menos a mi vista) tan perfectamente conservado y la fauna se dejara ver sin problemas. 


Fauna

Respecto a la fauna, cabe destacar que este es el único lugar de Irlanda donde está presente el ciervo rojo (Cervus elaphus). Yo solo me los encontré muy de lejos y no pude sacar ninguna foto decente, aunque por supuesto unos prismáticos normalillos me ayudaron bastante a observar estos animales que yo no había visto nunca.

Manada de ciervos rojos en la lejanía


Después, yendo a lo que más me importa en lo personal... las aves, por supuesto. No puedo decir que viera aves rarísimas que nunca he visto antes, pero sí en un mismo recorrido pájaros que habitualmente solo puedes observar en zonas geográficas bastante separadas. 

Primero las habituales en este tiempo y/o omnipresentes...
  • Herrerillo común (Cyanistes caeruleus)
  • Carbonero común (Parus major)
  • Carbonero garrapinos (Parus ater)
  • Pinzón vulgar (Fringilla coelebs)
  • Petirrojo europeo (Erithacus rubecula)

Petirrojo posado en una rama cerca del río

  • Turdus merula (Mirlo)
  • Turdus philomelos (Zorzal)
  • Lavandera (Motacilla alba)
  • Cuervo (Corvus corax)
  • Graja (Corvus frugilegus)

Graja en Ross Castle

  • Corneja cenicienta (Corvus cornix)
  • Grajilla (Corvus monedula)
Típicos de zonas húmedas e incluso costas:
  • Cisne mudo (Cygnus olor)
  • Cormorán grande (Phalacrocorax carbo)


Cormoranes. Uno desplegando las alas para secarse y/o
mejorar la digestión, como es costumbre en esta especie.

  • Ánade azulón (Anas platythynchos)


  • Gaviota reidora (Chroicocephalus ridibundus). Cerca del castillo Ross hay un pequeño afluente hacia el lago en el que al parecer reside una pequeña colonia de gaviotas reidoras (que compartían espacio y comida con los ánades). 

Gaviotas reidoras con plumaje invernal


Mil ecosistemas en un solo parque

Ejemplo de lago, bosque y montañas



Es sorprendente la cantidad de hábitats distintos que puede albergar la misma reserva. El lago es sin duda un punto de influencia importante para los ambientes colindantes, permitiendo la aparición de marismas y de bosques de ribera perpetuamente inundados. Gran parte del parque está ocupado por bosque húmedo y caducifolio, aunque también alberga las montañas más altas de la República de Irlanda (no llegué a visitarlas... La extensión del parque hace que sea imposible recorrerlo con solo un día), con pinares y avetosas.



La biodiversidad asociada a tan gigantesca cantidad de ambientes es fácil de imaginar, empezando por la fauna y terminando por una vegetación que varía en altitud y extensión formando paisajes totalmente diferentes. El bosque húmedo de la llanura de inundación del Lago Leane es uno de los más grandes de este tipo en Irlanda. El robledal (el más extenso de la isla) es el tipo de bosque más extenso de Killarney.

Un paraíso para las aves de ambientes húmedos




Además de bosques y orillas hay también grandes espacios abiertos (yo en especial los vi cuanto más cerca de la ciudad de Killarney). Es allí donde se pueden divisar con más facilidad las manadas de ciervos rojos tan características de la zona. 

Prados donde pastan los ciervos rojos


Patrimonio cultural e histórico

Ruina "random" en medio del bosque

Por supuesto, en el Parque Nacional de Killarney además de un despliegue natural también hay gran cantidad de patrimonio histórico en forma de ruinas desperdigadas a lo ancho y largo del parque.


Tal vez lo más conocido sea el Castillo de Ross (Ross Castle), edificado a principios del siglo XV. Bastión de leyendas, historias y supersticiones. Típica fortaleza con ventanas largas y estrechas para lanzar flechas y hacer difícil un contraataque. 

Ross Castle

La lástima es que me quedó la sensación de no haber visitado lo suficiente del Parque. Como ya he dicho, es el más grande a la isla de la República de Irlanda y me dejé muchas cosas por visitar. Quiero subir a las montañas más altas que hay por aquí, visitar las robledas con calma. Más, más y más. No tener coche me dificulta un poquito las cosas, pero volveré... Uy si volveré. 




--

P.D. Con la broma, al volver a la civilización ciudad me compré una enciclopedia de aves de Reino Unido y Europa. Inglés y pájaros, buena combinación para mejorar el idioma (al menos para mí). Fotos chulísimas, explicaciones científicas y muchos cantos en un CD. Y baratillo, que no va mal. 


jueves, 27 de noviembre de 2014

Cuando una puerta se cierra, otra se abre (o cuando un país te da la espalda, otro te recibe)

Cuando una puerta se cierra, otra se abre
(o cuando un país te da la espalda, otro te recibe)

Caragh Lake, condado de Kerry (Irlanda)

Al final me decidí. Di el gran paso. Algo que puede parecer pequeño pero que para mí fue un salto al vacío sin paracaídas. Más de un año parada fue sencillamente demasiado, y ahora estoy embarcada en algo que no tiene rumbo pero que necesitaba con todas mis fuerzas.

Necesitaba salir de España, de la continua e infranqueable espiral "no tengo trabajo porque no tengo experiencia y no tengo experiencia porque no tengo trabajo". Lo que estoy haciendo ahora no constará en mi currículum como uno de mis mejores logros en el ámbito científico, pero es un modo de poner el pie en un país diferente y, ¿quién sabe?, encontrar la oportunidad definitiva lejos de donde me la han negado.

Creo que en este momento sobrevolaba los Pirineos.
Una barrera tanto física como psicológica.

Ahora mismo (y si todo va bien durante unos cuantos meses más) soy aupair. El trabajo de aupair es algo muy común en los países anglosajones: una chica (también hay chicos, aunque son muchos menos) extranjera que es acogida por una familia para hacerse cargo de sus hijos mientras ellos no están en casa. No es una niñera ni una criada, sino que viene a ser más como un miembro más de la familia. Te ofrecen alojamiento y gastos pagados, además de un pequeño sueldo, con el aliciente de disfrutar del intercambio cultural y perfeccionar el idioma del país de destino (en mi caso, por supuesto, el inglés). Solo llevo dos semanas aquí, pero mi inglés es muchísimo más fluido de lo que fuera hace apenas un mes.

Actualmente resido en Caragh Lake, colindante al pueblecito de Killorglin en el condado de Kerry. Me ha acogido una familia con tres hijos, un niño y dos niñas de 5, 9 y 11 años respectivamente. En realidad elegí Irlanda porque sus gentes me parecen más "cálidas" y "alegres" que los ingleses, y por el momento no parece que me haya equivocado; aunque hay diferencias, por supuesto. Disfruto mucho del intercambio cultural, comparando constantemente con los niños y sus padres cómo son de diferentes las cosas entre España e Irlanda. Empezando por la gastronomía y terminando con festividades y juegos, nunca falta tema de conversación.

Orilla de Caragh Lake

Otra cosa que ansiaba explorar de Irlanda, tal vez por el buen recuerdo que tengo de mi viaje a la Isla Esmeralda hace 4 años, es su impresionante belleza natural. No creí poder ver nada más impresionante que la Calzada de los Gigantes, los Acantilados de Moher o la zona de Glendallogh, pero cada palmo de Irlanda es una pequeña joya para los amantes del medio ambiente. Un clima perpetuamente húmedo y lluvioso ofrece una tierra siempre verde, sembrada de lagos y ríos. Justo aquí al lado tengo el Parque Nacional de Killarney, el más grande de Irlanda y también el más antiguo (y que visitaré un día de estos, of course). 

En general la gente tiene bastante más conciencia ambiental que en España, en mi opinión. Reciclan absolutamente todo sin cuestionar las razones, utilizan placas solares y térmicas para el agua, hacen su propio compost con los restos orgánicos... También hay aerogeneradores para depende qué zonas. Muchas casas pueden abastecerse por sí solas en caso de necesidad. Aunque claro, tal vez esto sea algo mucho más común en el espacio rural, que es donde me encuentro, que en lo que viene a ser la ciudad.

Disfruto mucho de esta vida, para qué negarlo. Lejos de la ciudad y la aglutinación de gente y con un paisaje que para mí es sencillamente como pisar el cielo.


Pero no voy a engañarme a mí misma. Estas no son unas vacaciones, ni yo una "aventurera" que se va a ver mundo. Soy una emigrante que se va de España para ganarse la vida porque no puedo hacerlo en mi país. Y por muy bien que me traten, por mucho que me haya integrado en esta familia, no puedo perder de vista ésa tristeza remanente. La sensación de que algo no está bien por mucho que esté disfrutando el momento. El constante "y si": ¿y si me hubiera quedado en España? ¿Y si hubiera esperado un poco más? ¿Y si esto no conduce a nada? No lo sé. Tal vez haya muchísima gente que tenga también este run-rún constante entre ceja y ceja. 

Este no es mi sueño. Yo quiero ejercer mi profesión. No pretendo ser millonaria, ni ganar un suelo de más de 1000 euros al mes. Por supuesto que no. Pero sí una (una sola) oportunidad para la que me he estado preparando toda mi vida y 6 años en la universidad. Tengo muchos compañeros que de un modo u otro han conseguido seguir con sus profesiones, pero yo tenga la sensación de seguir estancada por mucho que haya empeñado el año y medio en el paro haciendo mis pinitos en diversos campos científicos. 

No sé cuándo volveré a España para quedarme. De verdad que no lo sé. Y eso me asusta. Igual que me asusta saber que las consecutivas generaciones de licenciados/graduados vean cómo les cortan las alas antes de poder salir del nido. Y por mucho que eche de menos a mi gente, a mi país, seguir sin "hacer nada" como hasta ahora no era una opción para mi estabilidad emocional. 

De momento, me quedo en Irlanda todo lo que pueda. No es como esperaba que sería mi vida a los 25, pero es mejor que nada. 


miércoles, 22 de octubre de 2014

Cine a favor del medio ambiente

Cine a favor del medio ambiente

Porque el séptimo arte es algo que mueve masas y que consigue que la gente quede atrapada en las historias que pasan ante sus ojos, se trata de un herramienta prácticamente indispensable para educar tanto a edades tempranas como para que los adultos recuerden cosas que habían olvidado.

El cine es una de mis grandes pasiones, y ya llevaba tiempo rondándome en la cabeza hacer una especie de lista sobre algunas de mis película favoritas con trasfondo medioambiental. Allá van, por si pueden dar alguna idea a alguien o puedan utilizarse en algún contexto de educación o sensibilización ambiental. O por diversión, por qué no.


-- Para niños --

No es que estas películas solo las puedan ver niños porque los adultos van a aburrirse, pero sí son aptas para mentes más inocentes y el mensaje es más fácil de entender. De hecho algunas es posible que se disfruten más con lo que trae la madurez, pero siempre son adecuadas para verlas acompañadas de peques. 

Dos hermanos (2004)


Temática ambiental: caza furtiva, maltrato animal, relación hombre-naturaleza

Es "para niños" pero ¡OJO! porque puede herir sensibilidades. Quiero decir... todo es precioso hasta que salen tíos con escopetas dispuestos a disparar a animales tan bonitos como los tigres. Igual tampoco es para críos tan tan pequeños. 

En el corazón de una selva del Sudeste Asiático viven Kumal y Sangha, dos cachorros de tigre que juegan felices bajo la atenta vigilancia de sus padres. Sin embargo su mundo se rompe en pedazos cuando una expedición llega dispuesta a saquear un templo cercano y su padre, el Gran Tigre, es muerto en el intento de protegerles. Sangha, el más dócil de los dos, consigue escapar con su madre pero Kumal es capturado y termina contra su voluntad en un circo, tratado duramente para que aprenda los trucos que tan cruelmente le enseñan. Por su lado, un príncipe de la zona encabeza una cacería en la que se topan con Sangha y su madre; aunque la dan por muerta, la tigresa huye con apenas un balazo en la oreja, pero a Sangha lo acorralan en una cueva y se convierte en una mascota del extravagante príncipe. El cautiverio no le sienta bien y sus impulsos agresivos le llevan a convertirse en una bestia entrenada para las peleas de exhibición. Años después, el destino lleva a Kumal y Saghna a coincidir en la arena como rivales que deben combatir a muerte. No obstante pronto se reconocen y sin pensarlo demasiado improvisan un plan de huida para regresar a su hogar. 

La película tiene de todo: gente que trata con crueldad a los animales y otros que simpatizan con ellos e incluso sienten cariño por lo que consideran adorables cachorros. Algunos se nos presentan como "los malos" y acaban siendo los mayores defensores de que al principio eran trofeos. Lo que queda totalmente claro en esta historia es que sacar a los animales de su medio natural puede acarrear consecuencias desastrosas tanto para ellos como para los humanos que les rodean. La infelicidad de los tigres al ser arrancados de su hogar y separados de su familia es algo que te dejan traslucir con sus gestos y las situaciones que les envuelven. No hay buenos ni malos, solo personas inconsciente y equivocadas. 




El lince perdido (2008)


Temática ambiental: especies amenazadas, caza furtiva

Esta es especialmente recomendable para los nenes españoles, dado que el protagonista es un miembro de la especie en peligro de extinción por excelencia de nuestra tierra, el lince ibérico, y también el felino más amenazado del planeta. Además se desarrolla en el Parque Nacional de Doñana, uno de los espacios naturales más emblemáticos de la Península Ibérica. 


Félix es un lince ibérico que está en el Centro de Recuperación de Doñana... y su estancia allí es recurrente, ya que es especialmente patoso y acaba internado una y otra vez al recibir todo tipo de heridas. Un día se convierte en el blanco de Noé, un excéntrico millonario que quiere reunir varios ejemplares de varias especies emblemáticas (al más puro estilo "Arca de Noé"), ya que gracias a ellos consiguió amasar su fortuna (por medios poco ortodoxos, se entiende). Para eso contrata a un cazador furtivo para que atrape al animalillo en medio de Doñana. En su aventura para librarse de tan indeseable destino, además de con una hembra de su propia especie, contará con la ayuda de algunos miembros de la fauna que también han acabado en el Centro de Recuperación, como son una cabra hispánica, un topo, un camaleón y un halcón.

No tiene una trama que lo flipas ni es un portento de la animación, pero desde luego los más pequeños (y no tan pequeños) pasarán un muy buen rato mientras aprenden algo. Tampoco está de más recordar que hay especies muy amenazadas en nuestro territorio, algunas de ellas únicas en todo el mundo, y que cualquier acción sobre ellas que no las favorezca puede contribuir a su desaparición. El lince ibérico es solo un ejemplo, pero vale la pena aprender todo y más sobre este felino tan característico de nuestra península. 


Producción y animación enteramente españolas, por cierto, como no podía ser de otro modo. 


Epic, el mundo secreto (2013)


Temática ambiental: deforestación, destrucción del hábitat, ¿desertificación?

Bueno, una en la que el ser humano no es por una vez el causante de muerte y destrucción, pero que imagino que permitirá a los más pequeños darse cuenta que debe haber un equilibrio entre la vida del bosque y la deforestación del mismo. En mi opinión una de las mejores películas de animación de los últimos años pero que ha sido bastante infravalorada, tal vez por coincidir con la buena aunque sobrevalorada Frozen

Tara, Reina de los Hombres Hoja y Corazón del Bosque

Mary Katherine (M.K.) regresa tras una larga temporada a casa de su padre, un científico obsesionado con la existencia de unos humanos diminutos que según él se mueven a una velocidad exhorbitada. Ha reunido multitud de pequeñas pruebas, grabaciones y demás, y está tan metido en su mundo que prácticamente ha olvidado a su familia. Lo que M.K. desconoce es que las teorías de su padre son absolutamente ciertas: en el bosque cercano a la casa habitan los "hombres hoja", guerreros diminutos que vuelan en colibríes, protectores de la Reina Tara, el corazón del bosque, que posee el poder de manipular la vegetación a su antojo. Precisamente en la fecha de la llegada de M.K., Tara debe legar sus poderes y responsabilidad en otro ser vivo del bosque, eligiendo uno de los miles de capullos florecientes en un estanque de nenúfares, para que así prosiga la lucha eterna contra los "boggans", portadores de destrucción y muerte. 

La belleza de los planos naturales, los detalles tan cuidados del mundo diminuto en el que nos planta la película, son muy importantes para comprender su trasfondo amigable con el medio ambiente. En este caso no hay una fuerza humana detrás que empuje a la destrucción de la naturaleza, pero seguro que los que puedan meterse en la trama sentirán al menos un "vacío" doloroso cuando ante nuestros ojos se presenta la desolación y los árboles resecos en contraposición a la exuberancia y el verdor del bosque en su apogeo. Al menos dan ganas de salir a dar un paseo por algún rincón natural cercano y fijarse en los pequeños detalles, oiga. 


Pocahontas (1995)


Temática ambiental: deforestación, destrucción del hábitat, explotación de recursos, relación hombre-naturaleza

Uno de los grandes clásicos de la segunda era dorada de Disney, y aun hoy en día el que conlleva el mensaje ecologista más fuerte. En esta ocasión tiene una base histórica, aunque solo hace falta dar un vistazo a Wikipedia para darse cuenta de que la han modificado muchísimo.

En 1607, uno de tantos navíos coloniales de Inglaterra parten desde Londres hacia el Nuevo Mundo (el continente americano) a la búsqueda de riquezas como hiciera en su momento el español Hernán Cortés. John Smith es un afamado explorador que ha combatido otras veces con aborígenes y que se enrola gustosamente en la aventura. Al otro lado del mar, en una de las tribus indias de lo que era la actual Virginia, vive Pocahontas, la hija del jefe Powatan que se enfrenta a la decisión de aceptar un matrimonio concertado por su padre o seguir su propio camino. La llegada de los conquistadores ingleses a su tierra hará que tanto el mundo de Pocahontas como el de su tribu dé un vuelco de 180º.

La búsqueda de oro y piedras preciosas en el recién descubierto continente americano es algo que sucedió sistemáticamente desde que la primera embarcación europea echó ancla en aquellos parajes vírgenes. Con una Europa que ya escaseaba en recursos por los largos siglos de explotación, la opción "obvia" era arrasar el Nuevo Mundo, deforestando masivamente para extraer los minerales ocultos bajo tierra. Por supuesto, los aborígenes eran un obstáculo para esta meta y eran constantemente sometidos e incluso aniquilados. Lo de Pocahontas es solo un caso, muy suavizado para la versión Disney, pero suficiente para hacer llegar el mensaje a los más pequeños (y también a aquellos que la recordamos con cariño). A diferencia de los conquistadores, que solo consideraban la naturaleza como un instrumento, los indios se sentían parte de ella y las otras criaturas eran sus iguales (pensamiento ecocéntrico).


"Te crees que es tuyo todo lo que pisas; te adueñas de la tierra que tú ves. 
Más cada árbol, roca y criatura tiene vida, tiene alma, es un ser"

"Descubre la riqueza a tu alcance sin pensar un instante en su valor.
Los ríos y la lluvia mis hermanos; amigos somos todos, ya lo ves.
Estamos siempre todos muy unidos en un ciclo sin final que eterno es.
¿Cuán alto un árbol crecerá? Si lo cortas hoy, nunca lo sabrás"


Wall·E (2008)


Temática ambiental: contaminación, producción  de residuos

Ganadora del Óscar a Mejor Película de Animación en 2009, es una de los largometrajes de animación más recordados de los últimos años. Una película en la que gran parte transcurre sin diálogos pero que tampoco los necesita, dejando que el poder de lo visual hable por sí solo. 

En un futuro relativamente cercano (año 2115), la Tierra acaba llena de residuos a tal punto de hacerla inhabitable para prácticamente cualquier forma de vida. La humanidad abandona el planeta y se traslada al espacio en gigantescos cruceros mientras dejan a una serie de robots, Wall·E (Waste Allocation Load Lifter - Earth class) para que encuentren y apilen los desperdicios para así limpiar la Tierra. En principio el proceso de solo debía llevar unos cinco años... pero desgraciadamente el nivel de contaminación del planeta es tal que se alarga indefinidamente. Al final solo queda uno de esos robots (el Wall·E protagonista), que se mantiene activo en su infatigable tarea tomando las piezas de otros Wall·E ya averiados. Wall·E por su lado ha desarrollado una conciencia propia, con curiosidad y sentimientos tales como la soledad o la imaginación. Por ello se dedica a revisionar vídeos de cuando la Tierra estaba habitada y a coleccionar objetos de todo tipo, como cajas de anillos, bombillas... e incluso una pequeña planta que ha germinado en una bota llena de basura. 

Un día aterriza una nave cerca de su posición y dejan bajar a varios robots conocidos como EVA (Extraterrestial Vegetation Evaluator), cuya misión es escanear la superficie en busca de indicios de vida, siendo esta la señal de que la Tierra ya es de nuevo apta para el regreso de la humanidad. Wall·E se enamora de una EVA, aunque ella tarda en mostrarse simpática (a golpe de láser). En cuanto le muestra su colección de objetos, EVA detecta y absorbe la planta que Wall·E encontró, entrando en estado de hibernación. Poco después la nave que la trajo viene a buscarla... y Wall·E se aferra al casco para seguirla hasta uno de los cruceros espaciales donde la especie humana se ha mantenido todos aquellos siglos.

Un futuro post-apocalíptico muy "light" pero que puede hacer entender a los más peques que la producción desmedida de basuras es un camino sin retorno. Yo la vi en su momento con una niña pequeña y le iba explicando a su vez por qué era tan importante reciclar o controlar las cosas que se compran, especialmente si tienen envoltorios que deben desecharse o son de un solo uso. También que si todos aportáramos nuestro granito de arena nuestro futuro no sería tan aciago. 


-- Para más mayores --

Ya sea por escenas violentas, mensajes más complicados o incluso alguna escena "picante", éstas ya no son tan aptas para niños muy pequeños. Tal vez no las entiendan, no las disfruten o puedan aburrirse. Depende siempre del espectador, en todo caso. 

Avatar (2009)


Temática ambiental: deforestación, destrucción del hábitat, explotación de recursos, relación hombre-naturaleza

Creo que no necesita presentaciones, siendo como es una de las películas más galardonadas de los últimos tiempos respecto al apartado visual. Y no es para menos: la vi dos veces en el cine y no hay ni un solo matiz de irrealidad. En un momento dado casi llegas a creerte que lo que estás viendo ha sido rodado en algún planeta lejano y no hecho con CGI. Una versión modernizada y de ciencia ficción de Pocahontas.

En el futuro, la Tierra se encuentra carente de recursos debido a la sobreexplotación masiva realizada por la especie humana. Así la humanidad va explorando nuevos planetas en búsqueda de fuentes de energía necesarias para el continuo funcionamiento de la industria. Una misión en concreto pone sus ojos en Pandora, un satélite del planeta Polifemo, cubierta de una densa selva pero con una atmósfera irrespirable para el ser humano. Pandora es rica en unobtanio, un metal hiperenergético con un valor altísimo en el mercado, pero está habitada por una raza de humanoides llamados Na'vi, de gran resistencia física y aspecto semi-felino. Jack Sully, un ex-marine paralítico, ocupa el puesto de su fallecido hermano gemelo, un científico de alto rango, en la exploración de Pandora. Para comunicarse con los nativos se han fabricado artificialmente unos cuerpos iguales a los de los Na'vi (avatares) que se manejan mediante la mente mientras el cuerpo humano reside inconsciente en un contenedor de seguridad. Jack y otros tantos tienen la misión de convencer a los Na'vi de abandonar su hogar, el Árbol Madre, bajo el cual se ubica el mayor yacimiento de unobtanio de Pandora.

Tras una serie de acontecimientos (en su mayoría catastróficos), Jack se pierde en la selva y es encontrado por Neytiri, la hija del jefe de los Omaticaya, la tribu más cercana de los Na'vi, que estaba dispuesta a matarle hasta que los mensajeros de su diosa Eywa (una especie de medusas flotantes) aparecen alrededor de él para sanar sus heridas. Neytiri lo considera una señal suficiente de que Jack puede ser bueno para el conflicto venidero y le lleva al corazón mismo de su raza, el Árbol Madre, en cuyo interior habitan los Na'vi. La nueva situación de Jack es muy conveniente para el objetivo de la expedición... ¿pero qué sucedería si empezara a vivir con más intensidad y felicidad cuando reside en su cuerpo de avatar que cuando lo hace en el propio?

De nuevo una historia en la que los aborígenes se ven expulsados de su tierra, unos lugareños con una conexión indiscutible con la naturaleza... aunque en el caso de Avatar esa conexión es absolutamente literal. Toda criatura viviente de Pandora, incluidos los Na'vi, tienen una extremidad con tentáculos que les permite conectarse con la vegetación y otros animales, creando un entramado de vida en el que cada eslabón es indispensable. Los Na'vi utilizan ése vínculo para establecer simbiosis con diversas monturas, como "caballos" o "dragones voladores", aunque también para dar y recibir información del Árbol de las Almas, el corazón vivo del ecosistema de Pandora. No hablemos ya de los portentos naturales que aparecen en la película, como las montañas flotantes, los coloridos reptiles voladores o la vegetación bioluminiscente. Cuando la película termina, sientes una extraña sensación de tristeza por no poder estar en un lugar así en la vida real (a mí al menos me pasó). 

Hay un pasaje especialmente significativo en el que Jack habla de que Neytiri le explica "el delicado equilibrio que existe entre el bosque y todas las criaturas que en él habitan", que "la energía fluye entre todos los seres vivos, y que es solo un préstamo que algún día hay que devolver". Además todos los seres vivos de la selva, incluidos los animales, parecen conectados con el Árbol de las Almas o Eywa y la conexión es recíproca. Tal y como el personaje se Sigourney Weaver dice, "hay más conexiones entre uno de estos árboles y los que le rodean que entre las neuronas de un cerebro humano". El ecosistema de Pandora es una especie de teoría de Gaia en la cual el mundo es un todo con conciencia propia capaz de reaccionar en función de lo que sucede en su superficie. Así ocurre en Pandora, cuando ésta moviliza una estampida contra los humanos que están atacando el Árbol de las Almas. 


"Los alienígenas regresaron a su planeta moribundo. Solo a unos pocos se les permitió quedarse"


El Señor de los Anillos (2001 - 2003)


La Comarca, representada en un pedazo de Nueva Zelanda

Temática ambiental: relación hombre-naturaleza, deforestación, destrucción del hábitat

Y diréis... ¿Qué cojones? ¿El Señor de los Anillos, en serio? Pues sí: TODA la saga en sí es una oda al equilibrio entre la civilización y la naturaleza, aunque el episodio más notorio respecto a esto sucede en Las Dos Torres, la segunda de la trilogía de Peter Jackson. Y es que, siempre recordando la obra escrita en la que están basados los largometrajes, Tolkien era un férreo defensor del medio natural y una especie de "negativista" sobre el avance tecnológico y los efectos colaterales de la industrialización. 

Para empezar, la raza más emblemática y que más desarrolló en su mitología son los elfos, los Primeros Nacidos: criaturas que viven en simbiosis con la naturaleza, ocultos en los bosques y con una gran atadura con los seres vivos. Algunos como Galadriel, señora de Lórien, o Glorfindel (en la película lo hace Arwen), que despertó al río Nimrodel, hacen gala de tener un dominio instintivo sobre la naturaleza. El único elfo "protagonista" del Señor de los Anillos, Légolas, siendo un simple guerrero sin ninguna habilidad especial puede oír la voz de los árboles o "comunicarse" con los animales con meros gestos (en el libro, los hombres de Rohan se sorprenden cuando consigue montar sin silla ni bridas al caballo que le prestaron). En esencia los elfos son lo que idealmente deberían ser los humanos, personas que más allá de respetar la naturaleza se sienten parte de ella como iguales. También los hobbits, que al parecer son una especie de alter-ego de como eran los ingleses antes de la revolución tecnológica en cuanto a la cultura, viven en un mundo agrícola y bucólico que parece de ensueño.

Tal como he dicho, en la segunda película éste dilema avance tecnológico-mantenimiento del hábitat adquiere una dimensión real y prácticamente literal con la aparición de los Ents, "pastores de árboles", criaturas con aspecto vegetal que en realidad se dedican a proteger el vetusto bosque de Fangorn. El mago Saruman está talando los árboles del linde del bosque para alimentar las forjas para las armas y armaduras de su ejército de orcos, lo cual despierta la ira de Bárbol y sus otros compañeros ents. Además ha construido un dique para contener las aguas del río Isen y así poder expandir su territorio alrededor de la torre. "La última marcha de los Ents" es uno de los momentos más épicos de Las Dos Torres, cuando éstos marchan hasta Isengard y revientan la presa que ha estado reteniendo al río. 

La Torre de Isengard, morada del mago Saruman

Tal como se dice sobre Tolkien en diversos documentales sobre su vida, tuvo que ver como el paraje natural y campestre en el que había vivido era destruido por la deforestación y la minería. Esta amargura tiñe cada parte de su obra, y en realidad todo El Señor de los Anillos en sí es una metáfora de cómo el antiguo mundo sucumbe ante una época tecnológica en la que el ser humano arrasa sin control con la naturaleza. Atentos a ésta cita de Saruman:

"El viejo mundo se consumirá en los fuegos de la industria. Los bosques morirán. Seremos adalides de una máquina de guerra a espada, lanza y puño de hierro de orco"




Entrelobos (2010)


Temática ambiental: relación hombre-naturaleza, espacios naturales

Aún recuerdo la primera vez que la vi, en un cine al aire libre en mi pueblo... y como lloré aunque mis amigos me miraran raro. Admito que el cine español nunca ha sido santo de mi devoción, pero en esta ocasión no pude más que rendirme ante lo innegable: esta es una película que marca el corazón. El público que no se levantó en toda la cinta (algo habitual en el cine al aire libre y gratis) me dan la razón de algún modo. 

La película narra la historia real (con seguras licencias, imagino) de Marcos Rodríguez Pantoja, posiblemente el primer y único caso documentado de niño feral en España. Marcos era el hijo de un matrimonio que vivía en la extrema pobreza en Ciudad Real y que, tras maltratar al chico, lo cedieron a un cabrero para no tener que mantenerlo. En aquella época el niño aprendió mucho sobre cómo sobrevivir en la naturaleza, pero su "benefactor" murió a causa de una enfermedad, dejándolo solo y aislado en Sierra Morena. Él nunca intentó regresar a la civilización, pues tenía más miedo de la gente que de los propios animales. 

Contra todo pronóstico, Marcos no murió sino que aprendió a vivir en aquel mundo sin tocar por el hombre gracias a una impresionante inteligencia salvaje. De hecho consiguió integrarse en una manada de lobos (metiéndose en una lobera con cachorros y protegido por la madre) y formando parte de ésta como un miembro más. Fue olvidando poco a poco el lenguaje humano para aprender a comunicarse con los animales que le rodeaban, imitando sus sonidos. Aprendió a aprovecharse de los jabalíes que encontraban tubérculos enterrados, a cazar para su manada e incluso tuvo una serpiente como compañera (en la película le acompaña un hurón). La Guardia Civil lo encontró doce años después, en el 65, sin haber tenido ningún tipo de contacto humano en todo aquel tiempo, y le "obligaron" a reintegrarse en la vida civilizada llevándole a vivir a un pueblo cercano.


No pude evitar que un escalofrío me recorriera la espalda (aún lo hace) cuando, aunque sepas que son lobos adiestrados, ves al protagonista juguetear con un lobo adulto como si fuera un niño. La escena final no tiene desperdicio, pues el auténtico Marcos (no un actor, sino el verdadero Marcos Rodríguez) regresa a esos montes y, en la vida real, nunca ha llegado a sentirse parte de la sociedad ni tan feliz como cuando está en plena naturaleza. Un trozo olvidado del propio ser humano que a todos nos convendría tener en cuenta.


"Cuarenta y cinco años después de ser atrapado por la Guardia Civil, Marcos aún tiene la sensación de haber aprendido poco de los hombres. 
La sensación de que nada tiene tanta verdad como aquellos años que vivió entre lobos"


La Princesa Mononoke (1997)


Temática ambiental: deforestación, destrucción del hábitat, explotación de recursos, espacios naturales, relación hombre-naturaleza

Por mucho que sea una película "de dibujos", no es recomendable para niños demasiado pequeños por la cantidad de violencia y sangre que contiene. Además hay ciertos mensajes que solo mentes más maduras entenderán. Esta es posiblemente mi película favorita de todos los tiempos, no solo de animación sino en general. La he visto tantas veces y en tantos idiomas que es imposible llevar la cuenta... y el mensaje ecologista es abrumador. 


La Princesa Mononoke es la obra culmen del estudio Ghibli y del director Hayao Miyazaki. A pesar de sus elementos mitológicos y fantásticos, está fuertemente vinculada a la historia real del Japón feudal en la época de la llegada de la pólvora y las armas de fuego por los viajeros europeos: los fusiles se volvieron tan populares que se produjo una deforestación masiva para encontrar hierro y para alimentar los fuelles donde se forjaban las armas y los proyectiles, algo registrado históricamente. De hecho en Japón no hay prácticamente bosques de más de 200 años, ya que todos son reforestados. 

Básicamente cuenta la historia de dos personajes: uno es Ashitaka, príncipe de una tribu perdida en las montañas, que queda maldito por un demonio y debe viajar para buscar una cura a su estigma antes de que éste lo mate. El otro es San, apodada "Princesa Mononoke", una chica humana criada por los dioses lobo del bosque (una niñera feral, vamos) y que no se siente parte de la especie humana. Estos dos se encuentran en un clima de hostilidad derivado del daño que los hombres de la Ciudad del Hierro hacen al bosque, cortando masivamente los árboles y matando a los animales para seguir fabricando sus armas. A lo largo de la historia, ambos tendrán que colaborar para conseguir un equilibrio entre las criaturas del bosque y los humanos que permita la convivencia pacífica de ambas partes. 

Hay que destacar el "preciosismo" de esta película: hay paisajes y escenas que pasan con una lentitud abrumadora, tomándose su tiempo para resaltar cada detalle, pero que hacen llorar aunque ni siquiera haya música de fondo. Siempre que se sepa apreciar la belleza de los espacios vírgenes, por supuesto. Cada brizna de hierba, cada flor, retazo de musgo e insecto aleteando han sido concienzudamente animados con las técnicas más tradicionales. Visiones como la de la charca oculta entre los árboles, con un conmovedor juego de luces y sombras, o aquel bosque nocturno que el joven Ashitaka contempla como ningún humano lo ha hecho antes roban casi literalmente el aliento. No espero que todos comprendan mi devoción absoluta por esta película ni mi obsesión por verla tantas veces, pero es una muy buena "literalización" del conflicto siempre activo entre el hombre y la naturaleza: en esta ocasión las propias criaturas se organizan para luchar contra los humanos, y son aquellos que caminan entre ambos bandos (una especie de ecologistas, ¿por qué no?) los que deben idear un modo de que las dos partes progresen sin destruirse. ¿No es a eso precisamente a lo que nos dedicamos los ambientólogos? 


"Los árboles gritan de dolor al morir, pero tú no puedes oírlos. Desde aquí siento la agonía del bosque."


La Selva Esmeralda (1985)


Temática ambiental: deforestación, destrucción del hábitat, relación hombre-naturaleza

Bill es un ingeniero que se desplaza a Brasil para dirigir la construcción de una megapresa en el río Amazonas. En una de las visitas al lugar donde ésta debe enclavarse, Tommy, su hijo de siete años, se encuentra con los miembros de la Tribu Invisible, célebres por su capacidad de camuflarse en la espesura. Inesperadamente su padre es incapaz de encontrarle de nuevo y resulta obvio que lo han capturado los aborígenes. Pasan diez años y Bill y su mujer no han cesado ni un instante de buscar a su hijo perdido al mismo tiempo que se ha ido construyendo el dique. Por su lado, Tommy es ahora un miembro más de la tribu de los Invisibles, que solo recuerda a sus verdaderos padres como si fueran un sueño muy lejano. El encuentro de ambos pondrá en contacto dos culturas que no habían coincidido jamás. 

El tema del choque entre aborígenes-grandes potencias se ha tocado infinidad de veces, pero lo interesante de esta película es la visión que tienen los indios sobre lo que está sucediendo con su amado hogar. No conocen nada más allá de la selva, considerándola "su Mundo", y todo lo que hay más allá está fuera de "los Límites del Mundo". La primera reacción de un joven cuando ve la zona deforestada donde se está ubicando la presa es: "Le están arrancando la piel al Mundo. ¿Cómo va a respirar?". El más mayor del grupo responde: "Cuando era pequeño, el Límite del Mundo estaba muy lejos. Ahora cada año está más cerca", ya que ha visto decrecer la superficie arbolada con sus propios ojos. La presa es "una gigantesca barrera de troncos que no deja fluir al río", y la culpa de que los Feroces, una tribu enemiga y caníbal, "se movieran a nuestra parte del Mundo". 


Esta es una incómoda y desafortunada realidad que aún sucede diariamente en América del Sur y África, el cómo Occidente y Estados Unidos arrasan territorios vírgenes para extraer recursos mientras obligan a los aborígenes, sus verdaderos dueños, a abandonar el que ha sido su hogar durante generaciones y generaciones. En concreto, los indios de esta historia no consideran demasiado bien a los de la ciudad:
"-¿Por qué se les llama el Pueblo Termita?
-Porque vienen al mundo y devoran todos los árboles ancianos, como si fueran termitas. "
No me cabe la menor duda de que los lugareños de las tierras industrializadas tengan una visión similar del hombre blanco invasor. 



"Cada día desaparecen 2000 hectáreas de bosque en el Amazonas. Antes había 4 millones de indios en el Amazonas; hoy [1985] solo quedan 120.000. Algunas tribus no han tenido jamás contacto con el mundo exterior. 
Ellos aun saben lo que nosotros hemos olvidado"


Nausicaä, del Valle del Viento (1984)


Temática ambiental: contaminación, destrucción del hábitat, relación hombre-naturaleza

De la misma manera que La Princesa Mononoke, del mismo estudio y director, hay que tener cuidado con la edad en la que se puede hacer ver esta película a los niños pues contiene escenas de violencia y "monstruos" que pueden dar algo de miedo aunque sea de animación. 

La historia nos planta en un futuro post-apocalíptico, mil años después de una Guerra Mundial que asoló la Tierra. En concreto existen miles y miles de hectáreas de un bosque tóxico, contaminado por las armas biológicas usadas en dichos conflictos bélicos, y habitado por unos gigantescos insectos mutantes conocidos como Ohms. Las personas viven en pequeños rincones aun sin contaminar, como el Valle del Viento, del cual la joven Nausicaä es la princesa. Aunque se trata de un enclave de ensueño donde sus habitantes viven en paz, dicho territorio colinda con varios países que están en constante guerra. Nausicaä, por su parte, se siente fascinada por el bosque contaminado, realizando diversas incursiones en él para observar la fauna y flora que allí han proliferado y tratando de comprender cómo poder convivir con dicho ambiente.

Un incidente que la hace caer sin protección a través del bosque contaminado la lleva a descubrir un mundo subterráneo, en las raíces de los árboles, donde el aire es respirable y puro y las aguas totalmente cristalinas. Nausicaä acaba de descubrir ni más ni menos que el bosque no es la fuente de la contaminación ni los Ohms portadores de enfermedades, sino que la finalidad última de aquella extraña vegetación es purificar el ambiente tras la guerra biológica del pasado y que de hecho la contaminación solo existe en superficie. Aún luchando contra las invasiones colindantes, Nausicaä tendrá que convencer a su propia gente y a los enemigos de que los Ohms no deben ser perseguidos y abatidos sino que la convivencia de ambos es la clave para recuperar el mundo natural que una vez tuvieron.

Dejando de lado los detalles fantásticos e incluso de ciencia ficción, esta película nos invita a reflexionar sobre el efecto purificador que tienen los ecosistemas aunque la especie humana se empeñe en añadir más y más contaminación. Quiero decir... es un hecho que la atmósfera ha conseguido aumentar el grosor del "agujero" de la capa de ozono en los últimos tiempos, que los bosques siguen ejerciendo su función de producir oxígeno aunque saturemos nuestro planeta de gases contaminantes, y así un largo etcétera. En el universo de Nausicaä (y desgraciadamente en el nuestro también), lo fácil es echar la culpa a cómo se comporta el medio ambiente y justificar las acciones de la humanidad porque la naturaleza "se revela" contra nuestro dominio.

A veces tendemos a olvidar que no estamos por encima de nadie y que también formamos parte de este entramado de vida que es la Tierra. No somos indispensables ni mucho menos, y de hecho y aunque suene cruel seguramente al planeta le iría mucho mejor sin nosotros. Esta película enseña que el que ayuda es ayudado, y que no hay nada en la naturaleza que sea inherentemente dañino para los humanos. Que la "simbiosis" de mutuo beneficio es el camino a seguir. Es un "ojo por ojo, diente por diente", en todo caso. Si uno recibe un ataque, lo lógico es que se defienda, y eso es precisamente lo que seguirán haciendo los ecosistemas incluso cuando el ser humano ya se haya extinguido: defenderse a su manera de aquello que los amenaza.


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¿Qué otras películas os han hecho sentir empatía por el medio ambiente?